Extraída de: https://concepto.de/avion/
Me gusta cuando te subes en un avión y a las pocas horas estás en otro lugar. No se entiende cómo vuela un avión. La primera vez que volé fue a Mallorca y llegabas en muy pocos minutos. Para ir a Canarias a la mili, me monté en un Hércules del Ejército. Tardaba más que un vuelo comercial, unas cinco horas. Tenía dos motores en cada ala.
Hace como 240 años estaban investigando cómo empezar a volar. Actualmente es el modo de viajar más seguro según las estadísticas. Hay más accidentes en coche, en autobús, en tren…
Sorprende vehículos como un helicóptero que puede quedarse parado en un sitio.
La electricidad es también muy reciente. Antiguamente se utilizaban lámparas de aceite.
Antaño se tenía que vivir cerca de un río para beber agua, porque no había agua corriente en las casas. Hay que dar valor a tener un grifo y que salga agua, o que enciendas una luz y tengas para ver. Si te cortan la luz o el agua es todo un problema. Hay gente que okupa casas. Van a fuentes a coger agua porque no tienen suministro. Sin electricidad no puedes ver la tele, la nevera no funciona y tienes que comprar cada día lo que vas a comer. No puedes lavar con la lavadora y tienes que lavar a mano en la bañera igual. Si tienes un piso luminoso bien, no necesitas luz artificial, pero por la noche… o pones velas o no ves nada. Sin luz puedes vivir, pero sin agua sería imposible. No te puedes ni asear, ni cocinar, ni beber…
Por ejemplo, en Venezuela cuando fui en 2009 tenían petróleo, pero no agua corriente. Venía un camión y llenaba un depósito, pero no se podía beber. Compraban garrafas tan grandes como las de butano. Aún así la hervían porque no se fiaban. Y aquí aún... en África la gente camina muchos kilómetros sólo para coger agua y traerla a casa.
La felicidad está en esas pequeñas cosas. También en la temperatura de la casa, que no haga ni frío ni calor, que no pases hambre y también pequeñas cosas como un paseo, caminar, tomar algo con compañía, la lectura…
Antonio Murillo Anting